
El vehículo se incendió, por lo que los agentes abandonaron el blindado y se desencadenó un intenso tiroteo entre las fuerzas de seguridad y los atacantes.
El batallón especial se encontraba en uno de los accesos de la barriada, donde supuestamente se esconden varios de los jefes del Comando Vermelho (Comando Rojo), la mayor organización criminal de Río y a la que se le atribuyen los ataques registrados en la zona en los últimos días. Se cree que el Comando llegó a un pacto con otras bandas antes enfrentadas entre sí para resistir los operativos de control policial en las villas.

En las operaciones de ayer se decomisaron 10 armas cortas, un fusil, una ametralladora, una escopeta, una granada, dos bombas incendiarias y una tonelada de marihuana , informó la policía. Hubo además una amenaza de bomba en el acomodado barrio de Ipanema, que obligó por unas horas a cerrar el tránsito allí.

“Los marginales quieren crear una situación de desesperación y pánico. Le pido a la población mantener la calma”, dijo el gobernador carioca, Sergio Cabral.

Tanto el gobernador como el alcalde Eduardo Paes consideran que la ofensiva violenta tiene por objetivo presionar a las autoridades para que suspendan la instalación de las llamadas Unidades de Policía Pacificadora (UPP) en barriadas que antes eran controladas por grupos criminales.
También del otro lado habría planes. De acuerdo con el diario Folha de Sao Paulo , los servicios de inteligencia de la policía carioca interceptaron charlas telefónicas en las que narcotraficantes de dos facciones criminales planeaban, ataques a las sedes de la gobernación y de la Municipalidad y el uso de explosivos en áreas con gran concentración de gente. La ciudad desarrolla un plan de seguridad con miras al Mundial de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016.
Fuente:CLARIN/Mundo