"Multidisciplinaria, contundente e inédita (por su neto corte de alta docencia) fue la propuesta virtual del Foro Internacional Pablo Medina, sobre la narcopolítica, que se realizó este 16 de octubre, organizado por el Movimiento Internacional Our Voice y Antimafia Dos Mil, en el marco del sexto aniversario del doble asesinato del periodista Pablo Medina y Antonia Almada, hecho criminal que sacudió a la familia del periodismo paraguayo, el día 16 de octubre del pasado 2014. Sacudón que por aquellos amargos días igualmente se hizo sentir en las redacciones de Antimafia Dos Mil de Latinoamérica e Italia, tomando en cuenta que Pablo Medina integraba la nómina de nuestros colaboradores preferenciales, particularmente porque aportaba a nuestros lectores informes relacionados con la denuncia del narcotráfico de su país y era un embanderado en el pedido de justicia por el crimen del narco estado, de su hermano Salvador Medina, hecho ocurrido con anterioridad. No debemos olvidar que hoy Paraguay es, a discrepancia de los gobernantes y de quienes prefieren la indiferencia, un país calificado como país donde el narco estado es su sello más destacado y en el que hay un muy sólido connubio entre los poderosos del sistema político y la criminalidad local. Cuenta de ello es la foto de portada que hemos elegido: Horacio Cartes rodeado, nada más ni nada menos que por el ideólogo del crimen de Medina y Almada, Vilmar “Neneco” Acosta (en los días dorados de su reinado como Intendente de Ipejú, embanderado con el Partido Colorado) y por la diputada Cristina Villalba, que fuera sometida a investigación, por considerarla en ámbitos de la vida de “Neneco” como madrina suya, y en consecuencia seguramente encubridora de sus actividades al margen de la ley, estando entre ellas su eventual participación el día del atentado mortal a Pablo Medina, de ahí que oportunamente debió declarar ante el Tribunal en la causa Pablo Medina, a la hora de sentarse en el banquillo a su protegido: Vilmar Acosta.

Por aproximadamente tres horas y media, los panelistas invitados –de países como Italia, Argentina, Chile, Paraguay, Brasil, México, Colombia y Uruguay- desgranaron la temática central del Foro, reafirmando la internacionalidad del evento, como una de sus características más salientes. Cada uno de los participantes también aportó, con profesionalidad admirable, su visión sobre la narcopolìtica extendida por su país, por Latinoamérica y por el mundo. Cada participante hizo además por añadidura, una radiografía de la realidad social y política de su propia tierra y de su propio estado de situación, tomando en cuenta los daños causados por la criminalidad organizada en sus respectivos países. En cada una de las intervenciones se acentuó con inconfundible vehemencia y sólidas convicciones, de hecho fuertemente arraigadas al sentimiento de justicia, la necesidad de abrir un frente común entre los ciudadanos del mundo (y en especial entre los jóvenes y los funcionarios públicos honestos) para poner punto final al avance del cáncer del narcotráfico, arrasando democracias, pueblos y vidas.

La voluminosa agenda de invitados y el nivel de las exposiciones hicieron de este Foro Internacional Pablo Medina, de este mes de octubre del 2020, prácticamente un inédito evento de neto corte docente. Una docencia aleccionadora, respecto a los alcances que tiene la criminalidad mafiosa, en diferentes puntos del planeta, en el marco de una actividad propia de estas organizaciones: el narcotráfico a gran escala.

El Foro en definitiva (en el que participamos como moderadores, junto a la activista argentina –rosarina- de Our Voice, Emilia Cardoso y el abogado paraguayo, Jorge Figueredo) permitió a la audiencia tener a su alcance un panorama integral (global) de la operatividad de las organizaciones mafiosas que giran en torno al narcotráfico internacional. Quienes estuvieron siguiendo atentamente las ponencias tuvieron a su alcance, de primera mano, información, análisis, y denuncias concretas sobre hechos del ayer y del hoy. Por espacio de tres horas y media, todos los involucrados en el contenido temático, lograron exitosamente, visibilizar a la audiencia el deterioro del sistema político en muchos países de Latinoamérica, a la hora de combatir corrupciones y grietas dentro de las instituciones de poder. Y en ese dramático contexto, la presencia de las organizaciones mafiosas de Italia (en especial de la ´Ndrangheta) es notoriamente visible, con sus efectos, que por cierto, resultan ser exclusivamente destructivos, por donde se los mire.

En nota aparte haremos hincapié en las muy valiosas ponencias de los invitados especiales: Giorgio Bongiovanni (fundador y director de Antimafia Dos Mil), Sonia Bongiovanni y Matias Guffantti, líderes emblemáticos del Movimiento Our Voice; y de los doctores Jorge Figueredo y Juan Alberto Rambaldo, de Paraguay y de Argentina, respectivamente

Participantes que fueron el brillo del Foro Pablo Medina

Entre los participantes no faltó la voz de Dyrsen Medina, hija del periodista asesinado, quien condenó al narcoestado por la muerte de su padre y la de otros periodistas asesinados por investigar los vínculos entre política y narcotráfico. Además llamó a “separar liderazgos partidarios y democratizar el acceso a la política”, entre otras iniciativas para luchar contra el narcotráfico.

El hermano de Pablo, Francisco Medina, recordó la muerte de su hermano por parte de mafiosos, que “están metidos en los tres poderes del Estado”, lo que Pablo “atacaba con toda su fuerza”. Y enfatizó: “No me surge otro periodista que se anima a hacer la misma labor que hacía Pablo. El periodismo que se ejerce acá (en Paraguay, ndr) no es ético ni independiente sino que es manejado por los capos mafiosos que acaparan las redes de información”.

Heber Santander, docente, magister en psicología y activista social colombiano, habló sobre el narcotráfico en su país, mencionándolo como “una transnacional (…) que le ha dado poder económico, político y militar, control territorial, a las mafias ligadas a diversos carteles. Hay una alianza estrecha de la clase política dirigente ligada a los partidos tradicionales y las mafias del narcotráfico para mantener el control del Estado”, destacando a la corriente política del ex presidente Álvaro Uribe. Señaló además que el actual presidente colombiano Iván Duque “es la expresión de una mafia que liga todos estos aspectos económicos, políticos y militares; es así como hoy tienen control del Ejército, la policía y algunos entes de control llevando adelante una dictadura soterrada”. El Estado de Colombia, para Santander, es un “Estado narco paramilitar”.

Ricardo Ravelo, periodista mexicano dedicado a la investigación sobre criminalidad, hizo un breve análisis sobre el problema de narcopolítica que tiene sumido a México –llamado por él “Estado fallido”- en la violencia, donde en los últimos 10 años al menos 60 reporteros fueron asesinados: “Hay vacío de poder, hay vacío de Estado”, y por eso florece la violencia. Ravelo destacó que México es el territorio más peligroso a nivel internacional para realizar la labor periodística: “La mayor parte de la violencia contra el gremio periodístico proviene de los hombres del poder: policías, militares, políticos, presidentes municipales, gobernadores, que incómodos ante la crítica han optado por violentar, ejercer fuerza, represión, cohesión, en contra de la libertad de expresión. Las investigaciones periodísticas han sustituido las labores del Estado. Es la lucha por dar a conocer las complicidades políticas con el crimen, y la que ejercen los propios políticos para que todo esto se mantenga en silencio”.

Claudio Rojas y María Cecilia Bartholín corresponsales de Antimafia Dos Mil, participaron desde Chile, recordando a Pablo Medina, a quien consideran un ejemplo a la hora de enfrentar el poder criminal: “En una América Latina donde todos los días se asesinan a periodistas, ambientalistas, y luchadores sociales, (Pablo) ha sido como un emblema para Antimafia y para los jóvenes de Our Voice que hoy constituyen la vanguardia en esta lucha en contra de sistema criminal mundial”.

Cinthia González es viuda de Liurenzo “Leo” Vera, periodista asesinado el 2 de febrero de 2020, en la localidad paraguaya de Pedro Juan Caballero, lindera con Brasil. Recordó la muerte de su esposo, asesinado en el jardín de su casa frente a su familia. González reclama que lleva ocho meses sin apoyo a su familia y sin ningún tipo de respuestas. “Me siento desamparada por las autoridades”, reclamó, y manifestó su “esperanza” de que a través del foro se pueda volver a activar la investigación de la muerte de su esposo “para que no quede impune su muerte”.

Carlos Del Frade es un periodista, escritor y diputado provincial de Santa Fe, en Argentina. Recordó que organismos internacionales han informado que “en los últimos 60 años hay 5 arterias que alimentan el corazón económico del capitalismo: el petróleo, la venta de armas, medicamentos, narcotráfico y trata de personas”, del cual de un 30 a 40% sus dineros provienen de negocios ilegales practicados a partir de lo que serían los nichos corruptos de los Estados de los distintos países” del mundo. Agregó además: “Las democracias en América del Sur a partir de los años ’80 se montan en esos sótanos de la democracia”, que son esos negocios paraestatales antes mencionados. “La relación de la política con el narcotráfico tiene por lo menos 50 años y se ha consolidado a través de elementos paraestatales”, nacionales y provinciales.

También participó del encuentro Alejandro Maidana, periodista de la ciudad de Rosario, Santa Fe, en Argentina, y redactor del diario Conclusión, quien ha escrito numerosas veces sobre los padecimientos y las luchas de los pueblos originarios. Más de 500 mil personas no tienen acceso a los alimentos básicos en Rosario, lo que ha engrosado las filas del narcotráfico. El lavado de dinero del narcotráfico se ve reflejado en las estructuras de la ciudad “asolada por los crímenes y el sicariato. El narcotráfico construye su poder desde el Estado (…), quien no acciona con políticas públicas para los más vulnerables”, definió.

Rolando Graña es analista político especializado en investigaciones criminales, y dirige el diario televisivo América Noticias. Respecto a la situación de Argentina, mencionó que si bien es un país de tránsito del narcotráfico, “no tiene grandes estructuras que logren hackear o condicionar a los poderes (…). Sí, tienen poder de corrupción, pero logran escalar a otro nivel”. Mencionó además que “las policías provinciales funcionan como los entes reguladores del delito de cada uno de los distritos. Las policías manejan los territorios y le cobran protección a los narcos para que los narcos puedan vender”, y encarcelan a la competencia, mostrando así que luchan contra este delito.

Jorge Chediak, abogado y ex ministro de la Suprema Corte de Justicia, hoy titular de la Secretaría Nacional para la lucha Contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo (SENACLAFT). En ese sentido, señaló que la realidad se ha complejizado en ese país, convirtiéndose de un país de tránsito a un país de acopio de droga, con el tráfico de grandes volúmenes de estas sustancias. “Hay que redoblar los esfuerzos, mejorar los controles”, particularmente los aduaneros, ya que las fronteras en Uruguay son “porosas”.

Adalberto Fox, abogado y ex juez de 1° instancia en lo penal de Paraguay, dijo que es “preocupante” que “el dinero de la narcopolítica se utilice en las campañas de los partidos políticos de Paraguay y de América del Sur, porque con ese dinero controlan el poder del Estado".

Andrés Colman es periodista y presidente de la Sociedad de Escritores de Paraguay. En su ponencia recordó que de casi 20 periodistas asesinados en Paraguay, el único que tuvo una resolución fue el caso de Pablo Medina. Los demás casos “continúan totalmente impunes. Esperamos que con el respaldo de organizaciones internacionales como Antimafia Dos Mil podamos avanzar en derrotar al narco estado y construir una democracia mucho más eficiente en Paraguay”.

Jimmi María Peralta es Licenciado en Filosofía de la Universidad de Asunción, y representa en este caso al Sindicato de Periodistas de Paraguay. Peralta señaló que los narcotraficantes tienen un vínculo directo con la política, financiando a los gobiernos locales en diversos cargos, o posicionándose a través de asociaciones que funcionan como trampolines para construir figuras que terminan teniendo representación parlamentaria. Arremetió contra las autoridades locales, que son cómplices de estas situaciones, y que la impunidad afecta a los distintos niveles de la sociedad paraguaya.

Idilio Méndez es periodista y un escritor muy conocido en su país, por la denuncia que hace de la corrupción en los centros de poder y el gobierno del Paraguay. En su participación apuntó a la influencia de grandes volúmenes de dinero que se incorporan desde el narcotráfico a la política, “que tiene una fuertísima influencia sobre los tres poderes del Estado. La primer víctima fue el Poder Ejecutivo”, indicó, y agregó que “los senadores ya no llegan financiando su campaña electoral sin aporte de este segmento de la población de los narcotraficantes” y de otras actividades ilícitas. Agregó además que “entre el 90% y el 100% del Poder Judicial está manejado por narcotraficantes”.

Presentación artística de jóvenes de Our Voice

A lo largo del evento, el Movimiento Our Voice mostró imágenes de actividades de expresión artística y cultural, como obras presentadas en algunas de las giras que realizaron en años anteriores, así como expresiones artísticas de algunos de sus integrantes. Pudimos ver a José Luis Rodríguez desde Paraguay, integrante de la Orquesta de Cateura, compartiendo melodías con su violín, y danzar a Sebastián Ortega, desde Paraguay.

Pero el broche de oro fue un cortometraje largamente esperado. Los jóvenes de Our Voice, bajo la dirección audiovisual de Nicolás Pereiro y con dirección artística de Diego Grachot, presentaron un video de denuncia sobre el vínculo profundo del narcotráfico y la corrupción con la política y el Estado, y cómo esa situación desemboca en violencia, secuestros y hasta asesinatos. Los datos que menciona el cortometraje fueron tomados de la realidad y nos dan un sacudón fuerte sobre lo que está delante de nuestros ojos y no queremos ver: el Estado de mentira, la impunidad y el silencio a los que estamos sometidos por causa de los corruptos y poderosos que nos gobiernan.

El cortometraje contó con el guión de Alejandro Díaz, Diego Grachot y Ramiro Cardoso. Siendo los actores: Victoria Pereira, Natalia Pereira, Leandro Pereira, Ramiro Cardoso y Diego Grachot. El sonido estuvo a cargo de Patricio Alod y en la edición y postproducción, junto a Nicolás Pereiro, trabajó desde Italia Stefano Centofante. En concreto la realización significó una coproducción compartida, que involucró a Paraguay, Argentina y Uruguay.

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