La situación de violencia desatada en el Sahara Occidental con el desmantelamiento del campamento Gdaim Izik por parte de las fuerzas de seguridad marroquíes y posteriores denuncias de genocidio, torturas y asesinatos realizadas por el partido Frente Polisario, el tema llegó a las Naciones Unidas. Tras el reclamo de activistas internacionales, el Consejo de Seguridad debatirá hoy acerca de lo ocurrido.
El órgano de Naciones Unidas encargado de la paz y la seguridad en el mundo había programado una sesión para el próximo 23 de noviembre, con el objetivo de que el enviado personal del secretario general de la ONU para el Sahara, Christopher Ross, informara a sus miembros de la última ronda de negociaciones mantenidas entre Marruecos y el Frente Polisario. Sin embargo, el desmantelamiento del campamento en el que se habían congregado unas 20.000 personas para protestar por las condiciones de vida que sufre la población saharaui, llevó al Consejo de Seguridad, a instancias de México, a adelantar la comparecencia de Ross para mañana, informó la agencia de noticias Europa Press.
El Consejo de Seguridad intentará recabar información sobre los últimos acontecimientos, por lo que es previsible que escuche los últimos datos que haya podido recolectar sobre el terreno la misión de la ONU en la zona (Minurso).
La Minurso está encargada desde 1991 de vigilar el alto el fuego entre las partes y de organizar un referendo en el que los saharauis tuvieran la oportunidad de decidir el futuro estatus del territorio.
Tras el debate, el presidente del Consejo de Seguridad de la ONU, el embajador británico Mark Lyall Grant, ofrecería una conferencia de prensa.
Adnmundo – 16/11/10