La gravedad de la situación llevó al primer ministro chino, Wen Jiabao, a viajar a la provincia de Jiangxi para inspeccionar las operaciones de rescate, en lo que constituyó su segunda visita en una semana a una zona inundada.
Las precipitaciones en las provincias de Jiangxi y Fujian alcanzaron hasta 196 milímetros durante un lapso de 24 horas que comenzó el martes, indicó el ministerio de Asuntos Civiles.
Según los pronósticos meteorológicos, nuevas precipitaciones tendrán lugar en cinco provincias y regiones del sur de China en los próximos días.
El balance de las inundaciones provocadas por lluvias torrenciales en el centro y el sur de China es de un mínimo de 211 muertos, mientras que se registran 119 desaparecidos