Jueves 18 Abril 2024

Como parte de su nueva estrategia energética de largo plazo, el Gobierno de la canciller, Angela Merkel, planea permitir que las estaciones atómicas operen en promedio 12 años más que lo prometido por su antecesor Gerhard Schroeder de tenerlas cerradas para el 2021.
Esa es una de las razones por la que la coalición de Merkel ha perdido popularidad desde su reelección el año pasado. La medida ha motivado grandes protestas, lo que podría afectar a los Demócratas Cristianos de Merkel en las elecciones regionales el próximo año.
"Se está dividiendo la sociedad donde ya estaba unida", dijo el presidente del partido opositor Social Demócrata, Sigmar Gabriel, al Parlamento en un acalorado debate antes de la votación.
Gabriel dijo que su partido demandaría al Gobierno en la corte constitucional de Karlsruhe por la ley. Los Verdes, quienes vistieron de negro durante el debate parlamentario, y varios estados federales también han dicho que interpondrían demandas.
La coalición de Merkel ha explorado caminos legales para evitar presentar el proyecto para una votación en la cámara alta, donde carece de mayoría. La oposición dice que eso no es legal.
El jueves, varios miles de protestantes se manifestaron a las afueras del Parlamento. Decenas de miles de personas han realizado mítines a través del país en protestas anti nucleares de una envergadura que no se veía desde el desastre de Chernobyl en 1986.
Antes del debate del jueves, protestantes de Greenpeace acudieron a las oficinas centrales de los Demócratas Cristianos (CDU) en Berlín para colgar una pancarta anti nuclear sobre la fachada, acusándolos de hacer "políticas para la industria nuclear".
El ministro de Medioambiente, Norbert Roettgen, dijo que la extensión de las plantas nucleares era simplemente un puente en la transición hacia fuentes renovables, acusando a la oposición de no tener una posición constructiva.
28 de Octubre de 2010
Por Annika Breidthardt