Estas tres declaraciones dramáticas se encuentran en un documento reciente del Pentágono, que deja poco espacio para la interpretación y nos hace entender los próximos movimientos del poder estadounidense. Por ejemplo, queda claro por qué los políticos y comentaristas de la mitad de Europa (y de Italia) se han desgarrado las vestiduras ante la idea de que Italia pudiera adherirse al proyecto de la Ruta de la Seda; y además, la perspectiva de una guerra nos coloca en la primera línea porque, al igual que otros países europeos, tenemos instalaciones nucleares en nuestro territorio y, por lo tanto, nos convertimos en un objetivo. En el análisis que Giulietto Chiesa propone en Byoblu, el marco geopolítico del momento e incluye a la Otan, Libia, Siria ¿qué nos espera para el futuro? ¿Estamos destinados a seguir siendo una vasija de barro entre las vasijas de hierro?
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