01SalvadorAllendedentrodelamonedadefendiendolajuntoasuscolaboradoresFotoFotologCom“SE ABRIRAN DE NUEVO LAS GRANDES ALAMENDAS POR DONDE PASE EL HOMBRE LIBRE”
A los 40 años del golpe de Estado facista en Chile
Por Jean Georges Almendras

11 de setiembre de 1973…11 de setiembre de 2013…

02FuerzasmilitaresgolpistasatacanLaMonedaCubadebateCuHan transcurrido 40 años del momento en que un Presidente legítimamente instalado en La Moneda (la sede del gobierno chileno), el doctor Salvador Allende Gossens, fue derrocado por un golpe militar encabezado por el Gral. Augusto Pinochet Ugarte.

Han transcurrido 40 años del momento en que durante el duro ataque fascista al presidente Allende éste habló a su pueblo a través de Radio Magallanes, una de las emisoras cuyas torres aún no habían sido bombardeadas lapso antes de ser atacada La Moneda.

Sus palabras fueron improvisadas y firmes, plenas de convicción, de firmeza y de amor por su pueblo. Palabras de un revolucionario, que hoy homenajeamos 40 años después, porque fueron palabras dichas para el futuro. Para el hoy. Palabras de un hombre leal a sus valores y a su investidura. Palabras, o mejor dicho enseñanzas  en medio de la metralla que tienen una extraordinaria vigencia.

03LaMonedabombardeadaconAllendeycolaboradoresensuinteriorFotoProfesorDanielAlbertoChiarenzaBlogsPotCom« Compatriotas Quizás sea ésta la última oportunidad en que me pueda dirigir a ustedes. La Fuerza Aérea ha bombardeado las torres de Radio Portales y Radio Corporación. Mis palabras no tienen amargura, sino decepción, y serán ellas el castigo moral para los que han traicionado el juramento que hicieron: Soldados de Chile, comandantes en jefe y titulares. El Almirante Merino más el señor Mendoza, general rastrero que sólo ayer manifestara su solidaridad y lealtad al gobierno, también se ha denominado director general de Carabineros »

“Ante estos hechos sólo me cabe decirle a los trabajadores: Yo no voy a renunciar. Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que entregáramos a la conciencia digna de miles y miles de chilenos no podrá ser segada definitivamente. Tienen la fuerza, podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza »

05SoldadosatancandoLaMonedafotoEsSottNet« La historia es nuestra y la hacen los pueblos. ¡Trabajadores de mi Patria! : Quiero agradecerles la lealtad que siempre tuvieron, la confianza que depositaron en un hombre que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. En este momento definitivo, el último en que yo pueda dirigirme a ustedes, espero que aprovechen la lección »

« El capital foráneo, el imperialismo, unidos a la reacción, crearon el clima para que las Fuerzas Armadas rompieran su tradición: la que les señaló Schneider y que reafirmara el Comandante Araya, víctimas del mismo sector social que hoy estará en sus casas esperando, con mano ajena, reconquistar el poder para seguir defendiendo sus granjerías y sus privilegios »

06AllendehablandoporRadioMagallanesdentrodeLaMonedaCiperchileCl« Seguramente Radio Magallanes será acallada y el metal tranquilo de mi voz no llegará a ustedes. No importa, la seguirán oyendo. Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal con la Patria.El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.
¡Trabajadores de mi Patria! : Tengo fe en Chile y en su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán de nuevo las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile! , ¡Viva el pueblo!, ¡Vivan los trabajadores! »

07DramaticaimagendelgolpePinochetistaenChileFotoNacionCom« Éstas son mis últimas palabras, teniendo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Tengo la certeza de que, por lo menos, habrá una sanción moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición.”

 
En los minutos que siguieron el ataque de las fuerzas terrestres apoyadas por tanques y las bombas de los aviones de combate de los golpistas fueron sellando el destino de todo un pueblo que había elegido por las urnas electorales a un presidente, a un revolucionario íntegro. Salvador Allende moría en el Palacio La Moneda y en las entrañas de Chile se instalaba la dictadura pinochetista.

08PresidenteSalvadorAllendeFotoTertuliaVientosEs 

Cuarenta años después las palabras de Allende siguen intactas en la memoria de miles de chilenos. De millones de ciudadanos del planeta. Siguen intactas para recordar y explicar a las generaciones que sobrevivieron, quién fue  él como hombre y como gobernante, qué se hizo en aquellos días del gobierno de Unidad Popular y porque hoy todavía esas heridas no han sido cerradas.

Cuarenta años después de la traición, por parte de los lacayos del régimen estadounidense, recordar esos días da dolor pero al mismo nos permite  homenajear merecidamente a Salvador Allende, y a todas las víctimas del golpe de Estado y de los tiempos que le sucedieron a ese mediodía trágico en las calles de Santiago.

Transcurridos cuarenta años desde aquel 11 de setiembre de 19973 en Chile,  nuestra redacción, que no comparte las corrientes golpistas, en país alguno, no quiere resultar indiferente a tan perverso y antidemocrático procedimiento de las fuerzas militares chilenas. Todo lo  contrario. Nuestra redacción se adhiere  a todos los homenajes y reconocimientos directamente dirigidos a quienes vivieron las injusticias y los atropellos de los dictadores y desea que verdaderamente llegue el día en que la impunidad, frente a situaciones de esta naturaleza, sea tan solo una palabra del diccionario, y no un recurso repudiable a la orden de los golpistas y de los criminales del terrorismo de Estado, especialmente en los años posteriores a los avasallamientos cometidos en el nombre de instituciones o de ideologías retrógradas y contaminadas de poderío e imperio.

Transcurridos cuarenta  años desde aquel 11 de setiembre, según las informaciones procedentes de Chile, el gobierno de Sebastian Piñera y la oposición conmemoraron de forma separada un nuevo aniversario del golpe de Estado de Augusto Pinochet Ugarte, unidos por la petición de verdad y justicia pero divididos respecto a la responsabilidad que cada bloque tuvo en las circunstancias previas a la asonada.

De acuerdo a la información de la agencia EFE el presidente Sebastian Piñera encabezó un acto en el Palacio de La Moneda, mientras que la ex mandataria y candidata presidencial Michelle Bachelet, encabezó otro –que comenzó dos horas antes- en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.

¿Y por qué actos separados? Porque las heridas  que dejó el golpe pinochetista hace cuarenta años no se cerraron aún. ¿Y por qué no se cerraron aún? .Porque el hombre chileno  todavía no está íntegramente libre, porque la falta de conciencia aún sigue siendo una materia no resuelta y porque los tentáculos del imperialismo yanqui siguen esparcidos  en esa tierra trasandina, en Sudamérica y en el mundo. Y porque todavía, para unos, Pinochet sigue siendo el  liberador del yugo marxista, sin comprender que ese fue un pretexto estratégico e ideológico de la época,  que encontró su nefasto eco en el soldado chileno, de ahí que  las manos de los militares chilenos, convencidos de esa estratégica  posición y obviamente manipulados, se mancharon de sangre. Y esa sangre derramada, que pertenecía a quienes lucharon contra el golpe, no ha 09CuarentasnosdespuesdelgolpedeEstadoloschilenosrecuerdanalosdesaparecidosenlascallesdeSantiagoFotoNoticiasUruguayasBlogsPotComsido borrada de la memoria del pueblo chileno  en contraposición con quienes hoy, serviles al imperio y a las corrientes del sector poderoso del ala derecha de Chile,  se atreven a recordar con honor y devoción al dictador Pinochet.

Un titular de un diario  montevideano, La Diaria,  dice textualmente “Sin Olvido. Chile recuerda la caída de Allende y aún busca reconciliación”. La periodista que se hizo cargo del artículo, Marina González, escribe desde Santiago  “la memoria del golpe está aún muy presente, en particular porque fue muy documentada. Los dos años de gobierno de la UP, y las 40 medidas impulsadas por Allende, habían atraído tanto a la prensa mundial como a miles de extranjeros, que huían de países vecinos (como Uruguay) donde si no había gobiernos de facto el clima político no era muy afín al progresismo, y también a otros que sin tener militancia política, tenían curiosidad y simpatía por esa experiencia socialista que había llegado al poder por las urnas. Eso permitió que se hicieran decenas de documentales con las imágenes en blanco y negro de ese día traumático, en el que los cadáveres aparecieron flotando en el río Mapocho (que atraviesa la capital chilena) y las radios comenzaron a emitir llamados a delatar a los extranjeros, acusados de haber importado la “sedición” y el desorden. Ese día empezó la dictadura de Augusto Pinochet, que entregó el poder recién en 1990”

La periodista  González relató además lo conversado en un encuentro que mantuvo con el abogado Roberto Garretón –uno de los fundadores de la Vicaria de la Solidaridad, organización católica que se movilizó desde adentro del país en los meses que siguieron al golpe- en el que éste refiriéndose a los documentales que están circulando sobre la dictadura chilena dijo que el tabú que prevalecía en los medios chilenos sobre el tema cayó en el año 2003, cuando el canal de la Universidad Católica, afín a la derecha,  sorprendentemente emitió un “muy buen” documental sobre la Caravana de la Muerte en el norte del país, un operativo que había consistido en el recorrido de oficiales de Ejército chileno para “agilizar” los procesos de los detenidos, en el marco del cual se cometieron numerosas violaciones a los derechos humanos.

Pero lo más interesante de la exposición de Garretòn en la entrevista concedida a la representante de La Diaria, es que éste no cree en las declaraciones de los últimos días en forma de arrepentimientos y reconocimientos de culpa que se están dando con motivo del aniversario.

Para Roberto Garretón, sigue apuntando en la entrevista, que el presidente Sebastián Piñera haya señalado las complicidades “por acción o inacción” de sectores como la prensa o la Justicia, así como de muchos chilenos de a pie, “es ridículo”, Y de inmediato consideró que “cuando es un Estado el que comete crímenes contra la humanidad las palabras no bastan”. Garretón también reclamó  políticas públicas en ese sentido destacando la necesidad de que se “detengan definitivamente los beneficios carcelarios que a veces reciben los condenados por esos crímenes”.

En la crónica de La Diaria se consigna además  que  para el mismo día 11 de setiembre se previeron  numerosos actos, encuentros e incluso estrenos teatrales para recordar lo que muchos consideran “logros” del gobierno de Allende, que un 11 de setiembre de hace 40 años quedaron aniquilados “aunque otros chilenos siguen creyendo que fueron esas mismas  medidas las que llevaron al país al golpe”

Pero en los tiempos que corren, por más que hayan chilenos y no chilenos opuestos a recordar a Salvador Allende, bajo riesgo de definirse descaradamente como pinochetistas o pro pinochetistas dentro de una línea derechista y pro imperialista, hay también personas que no se aferran a esas ideas, sino que por el contrario se desarrollan dentro de parámetros de la memoria sin  olvidar las injusticias de una dictadura sanguinaria y cruel.

Tal parece que hoy se viven tiempos de definiciones y si bien años atrás esta fecha se recordaba con mucho respeto por el presidente muerto defendiendo la democracia, nunca se realizaron tantas movilizaciones y actos alusivos a la jornada golpista en Chile como hoy, recordándola más como una página negra de su historia nacional, que como un día de reencuentro con la democracia. Porque el día del golpe fue  el día en que a la democracia chilena se la hizo añicos al son del plomo, de las bombas y de una milicia traidora y títere de la Casablanca.

No fue un día para enorgullecerse aunque haya todavía quienes consideran que fue el día de la liberación de la tiranía marxista. ¡¡Y vaya precio el que se pagó por  sacar del medio a la tiranía marxista!! Las calles de Santiago se bañaron de  sangre de chilenos. Sangre de muchos hombres libres. Sangre de un pueblo que fue 017AugustoPinochecuandosedecialealaAllendeaunqueluegolotraicionoFotoSergiodelpoliBlogsPotComavasallado por asesinos que deshonraron con su traición a las fuerzas armadas  chilenas, porque los golpistas optaron por la bandera estadounidense y no por la de su patria. Sangre de trabajadores. Sangre de artistas y de intelectuales, como la del popular cantautor Víctor Jara entre otros. Sangre de mujeres y hombres militantes. Sangre de jóvenes. Sangre y más sangre.
 
 Cuarenta años después del golpe en Chile, dicen las crónicas que  recorren el mundo, que miles de personas se acostaron en el piso cerca del palacio de La Moneda -por unos 11 minutos- como forma de manifestarse en contra del Golpe  de Estado. Se trató de una movilización que fue convocada en las redes sociales y que abarcó varias cuadras en la calzada norte de la céntrica Avenida Alameda de Santiago, en recuerdo de los cerca de 1.200 desaparecidos de la dictadura de Augusto Pinochet.

Por su parte un titular del diario EL Pais de Montevideo,  sobre una nota de la Agencia ANSA, consigna textualmente “A 40 años del golpe, Chile vive un cambio”. El periodista explica que los 40 años del golpe militar provocan una “explosión de memoria” en Chile, como si el pueblo habría dejado muy atrás el miedo, creciendo las ansias de conocer la verdad y en consecuencia de exigir justicia.

De acuerdo a la crónica de ANSA la socióloga Marta Lagos dijo “estamos viviendo un fenómeno social. Los chilenos están usando el 11 de setiembre para abrirse y provocar esta explosión de transparencia”.

Luego explicó: “Chile es un país cerrado, con una sociedad completamente conservadora que no es capaz de procesar los hechos en público. Si nos comparamos con Argentina, Uruguay o México, estamos muy atrasados”. No obstante, la profesional agregó que en los últimos años los chilenos ya dan cuenta de un cambio y que quieren mostrarse tal cual son.

Y continúa: “Por ejemplo, con las movilizaciones universitarias de 2011 empezó a salir un Chile a borbotones que reclamaba fuertemente. Y este movimiento se replicó en regiones que empezaron también a protestar mostrando una rebeldía en contra de la autoridad”

010AllendeviveFotoCeltibeticoBolgsPotComPor su parte la teóloga y religiosa Patricia Villarroel  dijo: "Este país cambió .No estamos abriendo las heridas, las estamos sanando. Por mucho tiempo habíamos callado, ya sea por miedo o cualquier otra razón, pero ahora tenemos el valor de mirar nuestro pasado. Durante mucho tiempo nos intentaron convencer de que el pasado era vergonzoso y uno se guardó las heridas pero ahora es distinto”

Debieron transcurrir 40 años para que sea distinto. Como se dice en criollo, debió correr mucha agua bajo el puente.  Agua que fue llevando en su correntada, las esperanzas de castigo para el dictador, que murió sin llegar a vivir un solo día preso por  la traición cometida.


Cuarenta años después, irónicamente un presidente elegido por el pueblo y de derecha, Sebastián Piñera  hizo un llamado a avanzar en una reconciliación nacional y superar los traumas del pasado. Precisamente en el mismísimo Palacio de La Moneda, que aquel 11 de setiembre fuera bombardeado por aire y tierra, Piñera, encabezando una celebración en recuerdo de las víctimas caídas el día del golpe señaló: ”Llegó el tiempo, después de 40 años, no de olvidar, pero sí de superar los traumas del pasado. El mejor legado que podemos entregarle a nuestros hijos es legarles un país reconciliado y en paz”.


Un aspecto a tomar en cuenta en las apreciaciones de Piñera, es que optó por salirse se los carriles de su partido, adoptando una posición directamente dirigida a enfatizar en las responsabilidades de los políticos de la dictadura y de sus “cómplices pasivos” en el atropello de los derechos humanos.

011MicheleBacheletenelactoporlos40aosdelgolpeenChileFotoSapanishXinhuanetComAsimismo el presidente Piñera reiteró su condena a los responsables directos de la violación de los derechos humanos e n Chile pero también de los que pudiendo haber hecho más porque tenían cargos de responsabilidad, influencia o investidura, simplemente no lo hicieron.  De ahí que Piñera recalcó: “Para poder seguir reconciliando nuestro país, vamos a tener que seguir avanzando por los caminos de la verdad y de la justicia”


Pero la onda expansiva del aniversario del golpe de Estado en Chile se hizo sentir también en el mundo entero y en el Parlamento uruguayo porque la Cámara de Diputados realizó  un homenaje recordatorio. De acuerdo a lo consignado por la prensa local la convocatoria para el homenaje no tuvo el eco suficiente. Asistieron legisladores del Frente Amplio y solo tres diputados del Partido Nacional, de los cuales  Ricardo Berois era el único titular, siendo suplentes los restantes. Del Partido Colorado asistieron cinco diputados.


El legislador frenteamplista José Bayardi al abrir la parte oratorio del homenaje hizo una relación de la vida de Salvador Allende oportunidad en que recordó que fue candidato a la presidencia de Chile en los años 1952, 1958, 1964, triunfando finalmente en 1970. El legislador frentista no dejó de mencionar los entretelones internacionales provenientes fundamentalmente de los Estados Unidos apelando al espionaje y a las acciones encubiertas para evitar, primero que Allende llegara al gobierno y luego, en el proceso del desgaste de su administración.


Por su parte el diputado del Partido Nacional Ricardo Berois puso especial interés  en mencionar que Salvador Allende “muere con las instituciones en un acto promovido por el despotismo pagando con su vida el respeto a la institucionalidad”


013GeneralAugustoPinochetapocodeconcretarselgolpedeEstadoFotoNewsBbcCoUkEn cuanto al legislador del Partido Colorado presente en el homenaje, Gustavo Cersósimo, dijo categóricamente que la gesta de Allende “fue la demostración de que la izquierda podía llegar al gobierno por medios pacíficos. Su muerte  no ha sido en vano sino una lección imperecedera para quien use la violencia. Fue la demostración de que el camino de la democracia era el correcto para la realización de los ideales de forma pacífica”


Tomando en cuenta todas estas apreciaciones, dentro y fuera de Chile,  hay una muy importante reflexión que hace la periodista Marina González,  de La Diaria, cuya crónica ha sido publicada en Montevideo el día 12 de setiembre.

La colega titula su nota “Siguen encendidos” agregando en el  primer párrafo que “40 años después del golpe de  Estado, en Chile demandaron verdad, justicia y cambios que retomen el legado de Allende.

Marina González relata que” el centro de Santiago estaba en ebullición acumulándose las marchas y las intervenciones, espontáneas u organizadas. Actores del 11 de setiembre de 1973 se mezclaron con nuevas generaciones”


Una de las marchas que  Marina González señaló como la primera de la jornada, fue la de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) cuyos participantes iban de camino a la estatua de Allende, erigida a un costado del Palacio de La Moneda desde el mes de junio del año 2000. Bárbara Figueroa, la presidenta de CUT  reivindicó las medidas que había impulsado Allende a favor del pueblo y validó “el poder legítimo de los trabajadores y las trabajadoras” y reclamó que “ante el nuevo ciclo que se anuncia como resultado del período electoral que se viene se les devuelva a los trabajadores el espacio de poder que perdieron y se los considere no como enemigos sino como actores constructivos”

Ahora bien, siendo que los diarios matutinos de Montevideo fueron un tanto restringidos en la cobertura de los actos en Chile y siendo que no todos  tuvimos la posibilidad de estar allí, en la jornada de homenaje a Salvador Allende, la crónica de Marina González para  La Diaria nos da una muy oportuna y muy rica perspectiva de lo que se vivió en los alrededores de La Moneda.

014LosultimosensalirdeLaMonedaantesdehallarseelcadaverdelPresidenteAllendeFotoestudianteAmateurBlogsPotComResulta muy ilustrativo, del clima que se vivió (y que se vive) en Chile, un fragmento de la crónica de González refiriéndose a la presencia en los actos de la agrupación de los integrantes de las Fuerzas Armadas y de seguridad dados de baja por mantenerse fieles a Allende.

“En ese marco habló el coronel retirado Pedro Guerrero Rojas quien reivindicó el legado de Allende y pidió que se apliquen varias reformas” se consigna en la crónica, agregando que “el  militar recordó la vida y la trayectoria política de Allende como el hecho de que había sido candidato a presidente tres veces antes de ser electo y asumir el cargo en 1979. También recordó el período previo al golpe de Estado, con las medidas gremiales en contra de las reformas socialistas del gobierno que lideraba al frente de la Unión Popular (UP) y el “perfeccionamiento” de los planes del golpe”

A los actos y homenajes se sumaron las reflexiones de neto contenido político, particularmente en Chile. El actual presidente de Chile, en el acto en La Moneda y ante integrantes de los partidos oficialistas, en los  que todavía hay sectores que estuvieron junto a Pinochet y aún lo defienden  dijo que el gobierno del socialista Allende quebrantó  la legalidad y el Estado de Derecho. Puntualizó que en ese período el resquebrajamiento de la democracia  y las malas políticas públicas fueron generando un creciente caos político, económico y social. Pero lo más  sorprendente es que Piñera  agregó: “ello no significa, por supuesto, que todas las responsabilidades sean equivalentes pero sí que fueron mucho más compartidas de lo que algunos todavía sostienen”. Hay que recalcar que Piñera en este acto infelizmente –para nuestro criterio-  nunca empleó el término dictadura aunque coincidió que no había justificación para las violaciones a los derechos humanos, con el saldo de 38.000 víctimas de prisión colectiva o tortura, y más de 3.000 fallecidos, de los cuales 1.200 siguen desaparecidos.

015AbogadoRobertoGarretonRadioUruguayComUyEn el otro extremo del mapa político de Chile, la favorita de las elecciones de noviembre 2013, Bachelet dijo que es justo hablar de la agudización del conflicto social durante el gobierno de Unidad Popular  y dijo además que “lo que no es justo es hablar del golpe de Estado como un destino fatal e inevitable. No es justo afirmar que hubiera una guerra civil en ciernes, porque para dar continuidad y respaldo a la democracia se requería más democracia, no un golpe de Estado”. También destacó que “las responsabilidades de la implantación de la dictadura, los crímenes cometidos agentes del Estado, la violación de los derechos humanos no son justificables, no son inevitables, y son responsabilidad de quienes los cometieron y los justificaron”

¿Y que opinión pueden aportar los familiares directos de Allende cuarenta años después del golpe de Estado? De acuerdo a lo consignado en La Diaria, tanto la sobrina de Allende como la sobrina nieta, Denise Pascal Allende y Alejandra Chadwick Pascal, respectivamente, coincidieron en señalar que “la sociedad chilena despertó y que gracias a ello un eventual nuevo gobierno de izquierda podrá impulsar cambios más alineados con las políticas de Allende”

Integrantes de la  Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Chile participaron de los actos siendo  representados en la parte oratoria por su presidenta Lorena Pizarro quien en diálogo con La Diaria dijo que sentía con mucha esperanza  debido a la importante convocatoria de las múltiples conmemoraciones lo que la hacía sentir orgullosa. Pero hubo una muy  interesante reflexión de Pizarro. Dijo: “El pueblo chileno está reclamando con mucha fuerza, verdad y justicia,  dándose cuenta de que la institucionalidad heredada de Pinochet es lo mismo que la impunidad y hay que ponerle fin”.

 Más tarde explicó que los chilenos suelen moverse en hitos y que los 40 años llegan en medio de movilizaciones estudiantiles, de reclamos de más verdad y justicia y de cambios institucionales, aludiendo a la voluntad de reformar la Constitución de 1980. Pero Pizarro se despachó con más reflexiones. Una en particular valorando que la memoria de lo ocurrido hace cuatro décadas ahora “conmociona al pueblo entero “y que el dolor que sienten como familiares de víctimas de la dictadura “se han transformado en resistencia”

Lorena Pizarro, después, fue mucho más directa, tal lo consignado en la nota de Marina González. Refiriéndose al reconocimiento de culpas por parte de actores políticos, como es el caso del presidente Sebastián Piñera, la dirigente de la Agrupación de Familiares Desaparecidos de Chile dijo enérgicamente: “los perdones son 016MomentoenqueesretiradodeLaMonedaelcadaverdeAllendeFotoElTiempoLatinoComindividuales; los institucionales tienen que ir acompañados de verdad y justicia”. Luego concluyó diciendo que para ella “no hay verdad y justicia en Chile porque aún hay pacto de silencio y porque no hay voluntad política”

Personalmente viví el golpe de Estado en Chile estando trabajando en la Colonia de Vacaciones de Asignaciones Familiares de Raigón, departamento de San José.  Tenía 18 años.  Por aquellos días  con mis compañeros de trabajo fuimos escuchando por radio todo lo que se iba transmitiendo sobre la trágica situación que se vivía en Santiago de Chile.

Todos estábamos atentos a esos acontecimientos que nos laceraban  el alma, porque sabíamos perfectamente lo que significaban para la región y para el Uruguay. Nos  mirábamos todos, sin saber cómo evitar tanto atropello. Aún a la distancia nos sentíamos avasallados. Y nos daba  mucha rabia todo lo que estaba sucediendo muy lejos de nosotros pero al mismo tiempo muy cerca porque apenas dos meses atrás la dictadura militar se había instalado en nuestro país.  Y mientras Allende en el Palacio de La Moneda, con su valerosa decisión de enfrentar a sus enemigos,  daba una heroica enseñanza a la humanidad, nosotros en el Uruguay comenzábamos a transitar por los espinosos senderos de la lucha contra la dictadura, sin imaginar que cuarenta años después aquella hazaña del compañero chileno se habría de convertir en un sólido emblema de la lucha por la libertad en una región constantemente azotada (devorada y saqueada) por el imperio del Norte.

018ElocuenteimagendelosdaosenLaMonedaFotoElUniversalComMxHoy todos recuerdan ese día en que un presidente fue literalmente traicionado por la criminalidad de los compatriotas que se dejaron seducir por los dulces y las mieles de un imperio hasta hoy decadente, inescrupuloso y  asesino desde donde se lo mire, y siempre a espaldas de un pueblo que muchas veces poco ha entendido ( y casi nada ha sido informado, porque en realidad ha sido y continúa siendo manipulado)  de las estrategias  tejidas y entretejidas en el seno del Pentágono, de la Casa Blanca y de los poderes adjuntos.

Hoy no podemos ignorar la lucha de Salvador Allende, más  aún  cuando damos un vistaso a los hechos del presente, en Sudamérica y en Europa. Porque la lucha en La Moneda, fue en resumidas cuentas  la respuesta a una infamia extendida por todo el mundo en aquellos días. La infamia de las dictaduras del Plan Cóndor.
 
Entonces, cuarenta años después, si acaso todavía tenemos la “delicadeza” de homenajear a ese hombre que en los momentos previos a su desaparición física logró dirigirse a su pueblo con palabras si se quiere proféticas, especialmente cuando dijo: “Tengo fe en Chile y en su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán de nuevo las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor »
¿ Se habrá superado definitivamente el momento gris y amargo de aquellos días de bombas y muerte? No me parece. Augusto Pinochet Ugarte, que fue el  estandarte de la traición a su patria y a su uniforme; que fue la autoridad rastrera de la época que no dudó en convertirse en un obstáculo para que el hombre libre chileno continuase construyendo una sociedad mejor, todavía tiene adherentes,  simpatizantes. Ese contrapunto  no resulta grato. No resulta óptimo para crecer con el alma y la cabeza  del revolucionario que fue el presidente Allende y el pueblo chileno que combatió la dictadura fascista y a la que hoy repudia y rechaza.
 
Ahora, cuarenta años después, y más que nunca, valen más que mil palabras,  mil actos y mil homenajes,  tomar el  ejemplo de los actos, los sentimientos, la ideología y la fortaleza de  Salvador Allende. Es lo menos que nos tocaría hacer. A usted y a mí. Porque la lucha continúa en la región y en el mundo. ¡Compañero Salvador Allende¡¡ ¡¡Presente, ahora y siempre!!!!