Es un hecho conocido que la 'Ndrangheta maneja desde hace años, con un régimen monopólico, el tráfico de cocaína en el hemisferio occidental. Y es igualmente sabido que en los últimos tiempos Cosa Nostra ha vuelto a invertir grandes capitales en el sector de las drogas.

El fiscal general de Catanzaro, Nicola Gratteri, entrevistado por nosotros, confirmó que el mercado de drogas no conoce crisis y nos dijo que "la 'Ndrangheta controla el 80% del tráfico de cocaína que llega a Europa. Traducido, significa una ganancia de cuarenta y seis mil millones de euros al año, tanto como las finanzas de un Estado europeo promedio".

En otra ocasión, hablando con el entonces Fiscal Jefe de Reggio Calabria y hoy Fiscal Nacional Antimafia, Federico Cafiero de Raho, nos explicó que cuando se llevan a cabo las principales incautaciones de drogas, de alguna manera, la sensación es que siempre que falta algo. Como si el estupefaciente secuestrado fuera sólo la punta del iceberg, un "regalito", un consuelo para los cuerpos de investigación que realizan un trabajo excepcional al combatir el narcotráfico. En otra entrevista agregó que "desde el momento en que se logra incautar una tonelada y media de cocaína por año en el puerto de Gioia Tauro, si esa es la cantidad incautada, debemos multiplicar al menos por diez para saber lo que ingresa. De esa forma se puede tener una medida del giro del negocio ilegal que amplifica las ganancias y el territorio internacional dentro del cual se mueve la 'Ndrangheta para tener el espacio necesario para operar".

En noviembre pasado, el fiscal adjunto de Reggio Calabria, Giuseppe Lombardo, se refirió a la fuerza de la 'Ndrangheta, "durante mucho tiempo la protagonista absoluta del narcotráfico mundial". Un mercado capaz de generar "beneficios excepcionales para ser explotados a través de instrumentos financieros cada vez más avanzados, extraordinariamente insidiosos por su capacidad para adaptarse a áreas operativas no tradicionales y también para condicionar las opciones de política económica".

Esto significa, reiteró el magistrado, que "las mafias son una amenaza muy seria para el sistema económico mundial", ya que "al tener grandes capitales para invertir, las grandes mafias, en particular la 'Ndrangheta, son las protagonistas de importantes movimientos financieros, generando mecanismos extremadamente peligrosos que tienden a alterar el equilibrio del mercado".

Las consideraciones de estos y otros magistrados involucrados en la primera línea de lucha contra las organizaciones criminales, las más ricas y poderosas del mundo, nos muestran la imagen que representa el secuestro en Toscana, el segundo más grande en nuestro país.

Si observamos los 400 millones de euros en efectivo, inmediatamente nos damos cuenta de que muy pocas empresas en el mundo, tal vez sólo aquellas que cotizan en bolsa, logran ganar una cifra similar en un solo día, gracias a un producto material como es la droga.

El estupefaciente, un producto nefasto y mortal, se transforma en un "bien" y en un "servicio" que la "mafia del mercado" (como la llama el Fiscal General de Palermo, Roberto Scarpinato) ofrece a los consumidores de todo el mundo.

Representa el negocio más poderoso del mundo, sólo superado por el tráfico y la venta de armas. Y las organizaciones criminales italianas, en alianza con los "cárteles" de los narcos de América Central y del Sur, controlan ese mercado. Así es como se revela una parte de ese sistema criminal integrado que, al conectarse con otros sistemas de poder (político, empresarial, económico, financiero) puede hacer saltar una democracia.

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*Foto de Portada: www.antimafiaduemila.com  / Carabineros y el secuestro récord en Livorno.