LA SAGRADA FAMILIA CRIMINAL
 
Carta abierta a Lucia Riina
Por Giorgio Bongiovanni – 8 de Febrero de 2014
Estimada señora Riina:
He tenido la oportunidad de leer su entrevista concedida a la colega Siana Vanella y que fue publicada en la revista Panorama el pasado 6 de Febrero. Al sumergirme en la misma me dio de verdad la sensación de vivir en un gran cuento para niños. Llevando a cabo la lectura se descubre una historia conmovedora, tierna que exalta el amor de la familia según los preceptos evangélicos de Cristo, nuestro Señor. Si ignoráramos la historia de su padre Salvatore Riina, de su tío Leoluca Bagarella, de su madre Ninetta Bagarella y de sus fieles hermanos, Giovanni y Giuseppe Salvatore, realmente sería una historia ejemplar para tomar como punto de referencia para todas las familias de Italia.
Pero lamentablemente usted ha borrado y olvidado, en la mejor de las hipótesis, pecando patológicamente de falta de memoria, y por lo tanto tenemos que ayudarla a recordar, en la peor de las hipótesis con muy mala fe, maldad, cinismo y ferocidad, que su padre le ha transmitido, la historia completa de su familia. Una historia criminal y sanguinaria, que para la teología cristiana incluso es diabólica.
Su padre ha asesinado a cientos de hombres y ha sido el ideólogo del asesinato de otros miles. Ha matado niños y algunos de ellos fueron disueltos en el ácido por orden suya, además ha dicho, y ha quedado lo suficientemente demostrado que “no importa si se asesinan niños porque en Sarajevo mueren muchos”. Él mismo se declara culpable, habiéndolo admitido durante sus conversaciones que fueron interceptadas en la cárcel con el boss de la región de la Puglia Alberto Lorusso. Interceptaciones en las que declara haber estado involucrado personalemente en los atentados en contra de los Jueces Chinici, Falcone y Borsellino e incluso contra el general Carlo Alberto Dalla Chiesa. A todos ellos les “hizo terminar como los atunes” y querría lo mismo para el Procurador sustituto de Palermo, el Fiscal que investiga sobre la negociación Estado-mafia, emitiendo una verdadera orden de muerte.
Siempre dentro del ámbito familiar, su tío Bagarella es uno de los criminales más feroces de la historia de la humanidad. Entonces usted amablemente tiene que escuchar y aceptar mi advertencia que no viene simplemente de un periodista de calle, como soy, sino además de un creyente cristiano como lo es usted.
No tiene que ofender la inteligencia de los verdaderos creyentes ni mucho menos blasfemar en contra del Espíritu Santo, como lo ha hecho en la entrevista de Panorama.
Si realmente ama el amor tendría que decirle a su padre Salvatore y a su tío Leoluca que se arrepientan primero ante Dios y luego ante los hombres, presentándose ante los magistrados de Palermo, de Caltanissetta y de Florencia, y quién sabe de qué otras Fiscalías de la República de Italia. Ambos tienen que decir toda la verdad en cuanto a los crímenes cometidos y entregar todos los bienes adquiridos de manera ilegal, pidiendo perdón a todas las familias a las que han causado sufrimiento, sobre todo a aquellas que han perdido niños a causa de su demente crueldad.
Si usted cree en ese cuento de hadas que ha descrito es la demostración de que su mente y su corazón son más que lábiles. Con esta carta no le estoy pidiendo que se arrepienta de algo. Le estoy pidiendo que diga la verdad ya que, incluso en el caso que no conociera los crímenes cometidos por su tío, por su padre y por sus hermanos, no tiene justificación para decir que su padre es un lector apasionado, cuando en cambio es un analfabeto y no sabe leer ni escribir, o que es un ejemplo de amor, es una ofensa para toda la sangre que ha hecho derramar. Usted podrá decir, y es absolutamente cierto, que no es sÓlo su padre el que cometía determinados crímenes.
Ha habido hombres del Estado que han traicionado la Constitución y que se han aliado con su padre, o viceversa. Es cierto que hay hombres del Estado, pertenecientes a las instituciones, hombres de la iglesia y de la gran finanza que han participado en los atentados junto a su padre y también es cierto que el Estado no está limpio, pero esto no justifica que realice estas delirantes declaraciones en Panorama. Una revista que, como es sabido, pertenece a un empresario que ha colaborado financieramente con la asociación criminal Cosa Nostra, de la cual su padre es el jefe. Por lo tanto, si usted tiene un poco de conciencia cristiana y un poco de respeto y educación ante las muertes injustas que su familia ha provocado, tendría, como mínimo, que pedir perdón. Porque su silencio, así como el silencio de su madre y de sus hermanos, no los convierte en otra cosa más que en cómplices de los atentados y de los crímenes cometidos por su tío y por su padre. Por lo tanto, si quiere tener algo de dignidad, en lugar de pintar cuadros comience a escribir cartas y memorias para rescatar la sangre de su familia ante Dios y ante los hombres.
Cordialmente
Giorgio Bongiovanni.
P. D. Frente a la entrevista publicada por Panorama, en la que se presenta a la familia Riina como la sagrada familia italiana, me surge una pregunta espontánea. ¿Qué piensan el general Mori y el teniente coronel Ultimo, nuevos colaboradores de la revista? ¿Renunciarán a la misma?

http://news.panorama.it/cronaca/Lucia-Riina-Figlia-Toto-Intervista