jorge figueredoPor Jorge Figueredo, desde Asunción del Paraguay-20 de Noviembre de 2019

La decisión de la justicia brasileña de dictar una orden de captura internacional, incluso de comunicar a la Interpol dicha resolución, con código rojo contra el ex presidente y empresario paraguayo Horacio Cartes (HC) y actual senador vitalicio- a pesar de las variadas investigaciones entabladas contra él desde los Estados Unidos, y Brasil por estar vinculado supuestamente al contrabando de cigarrillos, al lavado de dinero proveniente del narcotráfico y otras actividades ilícitas- sorprendió a los diferentes medios de comunicación y a la ciudadanía del país.

Es muy llamativa que esta movida de la justicia brasileña se de dentro de un contexto político-económico nacional y regional de confrontación entre poderosos grupos económicos, así como de una crisis social y política en varios países como Chile, Ecuador, Bolivia, Argentina, Uruguay , Paraguay , donde se está poniendo en entredicho a la supuesta democracia vigente en ellos , revelándose que en realidad vivimos dentro de una falsa democracia, de una dictadura mafiosa con ropaje de ritual democrático, donde se vota pero no se elige.

Nadie duda de las relaciones de Horacio Cartes con Darío Messer. Ya desde la década de los 80 y principios de los 90 existen indicios de su vinculación con diversas actividades ilícitas, ya durante la dictadura de Stroessner como por ejemplo la evasión de divisas, y posterior al 89 , delitos que van desde el contrabando de cigarrillos, el lavado de dinero, y hasta el narcotráfico.

La justicia brasileña con sus investigaciones revelo que existiría una especie de Sociedad Oculta entre Dario Messer y Horacio Cartes. Ambos se consideraban " amigos del alma" ; se han hecho favores mutuos, donde lo que prevalecía siempre es la circulación y transferencias de millones de dólares a las cuentas abiertas en los bancos paraguayos, propiedad de Cartes, de mucho dinero y de dudoso origen, proveniente del Brasil . A pesar de resultar evidente para varios investigadores de la prensa, políticos, y analistas la fluida relación que siempre mantuvieron Cartes y Messer, el ex presidente paraguayo siempre buscó ocultar sus relaciones comerciales con Messer y sus vínculos con mafiosos como Fadh Jamil, considerado una de las cabezas de la mafia en la Triple frontera en su momento, con quien realizó varios negocios desde el año 1993. Hay que recordar también que uno de los hijos de FadhYamil fue sospechoso de ser uno de los autores intelectuales del asesinato del periodista Santiago Leguizamón en 1991, hecho que ha quedado impune.

La historia de Horacio Cartes es una muestra de la debilidad institucional, la corrupción y la impunidad reinante en el Paraguay. A pesar de contar con un prontuario enorme, con varios antecedentes de delitos, con indicios de estar vinculado al lavado de dinero, al contrabando, al narcotráfico, ya después de la caída de Stroessner, jamás fue investigado, procesado y mucho menos condenado por la justicia paraguaya .

No debemos olvidar que Cartes fue fundador del Movimiento político " Honor Colorado", del Partido Colorado, y que formaba parte del mismo el ex intendente de Ypejhu, Vilmar " Neneco" Acosta (líder de una banda de narcotraficantes del departamento de Canindeyú y condenado como autor intelectual del asesinato del periodista Pablo Medina) el ex gobernador del departamento de Canindeyú, Alfonso Noria y la diputada Cristina Villalba, amigos de Vilmar Acosta, y que son sospechosos también de estar vinculados con la muerte del comunicador.

El Director del Diario 5 días, Dr. Benjamín Fernández Bogado, en un programa televisivo manifestó: “el hecho que el Brasil haya decretado la captura internacional de Cartes, transmite un mensaje al Paraguay, que tenemos escasa soberanía sobre nuestros asuntos, que es un país en joda, que los paraguayos somos incapaces de procesar y mucho menos condenar a los poderosos, por la debilidad de nuestras instituciones. Vivimos en una cultura de la impunidad. Aquí no existe el Estado ni la república. Debemos animarnos a cumplir las normas, trabajemos para ser un país serio y no informal".

El Dr. Hugo Estigarribia, abogado constitucionalista, ante la consulta de si es el fin de Horacio Cartes, expresó: "Es difícil predecir lo que va a acontecer, ya que el Paraguay es el cementerio de las teorías . Sí, podemos sostener, que lo ocurrido es un golpe fuerte al Paraguay, como fue un golpe fuerte cuando eligieron a Cartes, siendo investigado en varios países por hechos ilícitos. Fin de que los bandidos se alejen de la política, fin de la financiación política ilegal. Lo ocurrido también nos demuestra que el Paraguay es una democracia tutelada, por Brasil y por Estados Unidos”.

El eventual procesamiento de Cartes por la Justicia Brasileña, tendría varias facetas y efectos : uno de ellos es el efecto político, ya que seguramente dentro del Congreso Nacional se debatirá si Horacio Cartes, como Senador Vitalicio tiene fueros o no ; y en caso que tenga fueros, se deberá votar para la aceptación o rechazo de su desafuero y hay que ver las acciones que emprenderán los cartistas en relación al gobierno de Mario Abdo, pues hasta ahora habían evitado su juicio político, a cambio de una mayor injerencia en el gobierno. Sin embargo ahora podrían cambiar de postura y preparar un golpe político contra el presidente; otro efecto sería a nivel jurídico: desde el punto de vista legal las autoridades judiciales paraguayas analizarán si la orden emanada del Brasil cumple con los presupuestos de la legislación penal y procesal penal paraguaya para una eventual extradición de Cartes ; otro efecto es a nivel económico , pues tradicionalmente el Brasil en su relacionamiento con el Paraguay, ante una negativa por ejemplo de extraditar a un delincuente (en este caso si ocurriera que el Paraguay denegase la extradición de Cartes) el Brasil podría aplicar represalias económicas contra el Paraguay, que en esta ya difícil coyuntura económica lo puede llevar a una grave recesión; y por último, los efectos diplomáticos : no hay que olvidar que en pocos años más culmina la vigencia del Tratado de Itaipú, y ambos países deberán volver a renegociar cómo se dará la administración de la energía eléctrica, por lo tanto, el Brasil podría exigir al Gobierno de Mario Abdo Benítez que no cambie sustancialmente el contenido del Tratado que históricamente ha favorecido al Brasil.

Independientemente de todo lo señalado, las instituciones del Estado paraguayo se encuentran en una de las encrucijadas más decisivas de su historia. Depende de la decisión que tomen o la responsabilidad que asuman en relación al caso Cartes, para fortalecer y apuntar a la construcción de un verdadero Estado Social de Derecho como garantiza la carta magna del país. O de lo contrario, permitirán que la cultura de la impunidad, de la ilegalidad, y la narco-política sigan condicionando al Estado, y sigamos siendo conocidos como un país Estado-mafia.

Finalmente el pueblo paraguayo también tiene una disyuntiva: continuar pasivo , aceptando temeroso lo que decidan entre cuatro paredes sus mandatarios, y autoridades judiciales en relación a la causa penal que involucra a Cartes en el Brasil o asumir un protagonismo militante y civil, que promueva una revolución de los valores, una revolución cultural , que lleve a la expulsión de la mafia y del crimen organizado que se ha insertado dentro del Estado y la cultura política del Paraguay. Urge desterrarlos definitivamente y empezar a construir una cultura de la legalidad, donde prevalecerá la justicia social, la auténtica democracia y el Estado de Derecho.

*Foto de Portada: www.airedesantafe.com.ar