SenadorEleuterioELEUTERIO FERNÁNDEZ HUIDOBRO, SENADOR, RENUNCIA TRAS VOTAR A FAVOR DEL PROYECTO INTERPRETATIVO DE LA LEY DE CADUCIDAD
-¿Cómo llega al extremo de dejar la banca en el Senado después de votar a favor del proyecto interpretativo de la ley de Caducidad?

-Nosotros consultamos a conciencia en la CAP-L el texto de la ley interpretativa con abogados de izquierda y llegamos a la conclusión que es malo, aunque se salga a decir el disparate de que estamos defendiendo la impunidad. Los abogados que consultamos dijeron que era un mamarracho, estaba mal hecho el proyecto, mal redactado.
-¿Por qué es un mamarracho el texto de ley interpretativa?
-Hay inconstitucionalidades y violaciones a los derechos humanos en el texto. Pero como no soy abogado me afilié a una tesis y la defendí, quedé en minoría y no tuve otra que acatar y votar. Ojalá tenga razón la mayoría y nosotros estemos mal asesorados y equivocados. Es una tragedia para la gente que se llenó de expectativas y que un día se entere que no es así, la verdad que no quiero estar en su pellejo. El texto no va a lograr los efectos para los que fue creado, tiene trancas y debilidades jurídicas. Lo primero que va a hacer cualquier abogado es ir a la Suprema Corte de Justicia y es muy probable que se decrete la inconstitucionalidad.
Caricaturadelexguerrillero-Más allá del texto, ¿cuál es su discrepancia de fondo con la anulación de Caducidad?
-Hacía menos de un año que el pueblo había dado otro veredicto, no podemos de ninguna manera eludir la necesidad de convocar nuevamente al pueblo. No había más remedio, se tendría que haber convocado otra vez a un plebiscito.
-¿Si en el Frente le solicita que no abandone la banca, está dispuesto a volver atrás?
-No, esto es indeclinable. Sería un mamarracho hacer eso.
-¿Su renuncia es una despedida de la política?
-No, para nada, yo no nací acá y todo puesto de lucha es importante. Hay muchos lugares donde trabajar desde la militancia.
-¿Usted había informado de su renuncia al presidente José Mujica y al resto de sus compañeros?
-No. La decisión de dejar la banca la tomé en febrero de forma personal, si yo decía algo presionaba mal un debate que debía ser limpio dentro del Frente. Había conversado con el ministro (Luis) Rosadilla, que se encontraba en Río de Janeiro y él estaba de acuerdo con mi renuncia. Mujica no sabía nada, se enteró cuando lo dije en la sesión y vino a saludarme después.
-¿Qué le dijo Mujica respecto a su renuncia?
-Somos viejos compañeros, nos comimos las palizas parlamentarias de lo que era la oposición cuando estábamos en minoría. Me vino a saludar, no hablamos demasiado.
-Si se tiene en cuenta su postura y la del senador Jorge Saravia, ¿la anulación de la Ley de Caducidad le hizo pagar al Frente Amplio un precio demasiado alto?
-No creo. Pienso que le va a hacer muy bien al Frente. Esto va a obligar a la autocrítica. Esto revive el Frente, porque se había deteriorado un poco la discusión.
-¿El Frente Amplio pierde credibilidad al insistir en anular la Ley de Caducidad?
-Pierde credibilidad el instrumento (de la consulta popular), que es más grave. Porque la herramienta fue usada por todos los partidos en horas dramáticas, es muy importante como para desprestigiarla.
Fueguerrillerohistrico-¿El Frente se encaprichó en anular la Ley de Caducidad?
-Por lo que yo sé esto fue una comisión especial que trabajó dentro del Frente Amplio. El presidente Mujica no armó este lío, él dijo que estaba en manos del Parlamento. El canciller Luis Almagro sí participó en esta comisión especial y la misma oposición le preguntó si venía en carácter de canciller o militante. Hubo ciertas desprolijidades y el canciller tiene derecho a opinar, pero creo que el texto está mal redactado y el canciller fue el que lo redactó; supongo que presionado por el caso Gelman que teníamos en marcha en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Almagro quiso apretar el acelerador con el tema y ahí hay un error político a mi juicio.
-¿Quién cometió el "error político" de insistir con la anulación de la Caducidad?
-Todos los que tomaron la iniciativa, inclusive Almagro. Sin ningún problema lo digo. Mi pelea y la de la CAP-L fue para convencerlos, de que esto está endeble y es fácilmente atacable. Por esto vamos a pagar después el desaliento de gente que creó expectativa.
-¿Su renuncia puede influir de alguna forma en el ingreso de la CAP-L al Frente?
- Sí, puede ser, si se tiene en cuenta que los mismos sectores mezquinos que tomaron la resolución democrática de que salgamos a buscar firmas para ingresar al Frente -teniendo 78.000 votos, senador y diputados- tienen mucho poder.
-¿Por qué se le ha hecho la oposición a la CAP-L?
-Por lucha por el poder dentro del FA, que no sirve para nada, pero que para los burócratas es fundamental. Es la lucha por la sillita.
El País Digital/Valeria Gil